¿Hay algo más tierno que una foto de un bebé recién nacido durmiendo? Nos transmite paz y serenidad. Al verlo tranquilo sabemos que todo está bien; ha comido, está limpio, calentito y con mamá…
El nacimiento de un bebé en una familia es un acontecimiento único. Todo el esfuerzo de su madre por traerlo al mundo se ve recompensado. Les llenamos de regalos, de amor, de protección. Llenamos la casa de fotos del bebé. El recuerdo de estos primeros días de vida es realmente un tesoro.
Las sesiones de bebés son especiales, porque no usamos luces artificiales para no molestarles las hacemos con luz natural, en su propia casa, a la que acaban de llegar. Dentro de los 10 primeros días los bebés caen en sueños profundos si están cómodos y a gusto, por lo que suelen adoptar la postura que quieras ponerles. Además son súper flexibles y se amoldan bien a cualquier superficie, una cuna, los brazos de su papá… son las llamadas fotos newborn.
Pero no solo están las fotos de recién nacido. Las fotos de bebés podemos hacerlas en distintas etapas de su crecimiento. Cuando ya tienen más de tres meses comienzan a tener mejor visión y a descubrir el mundo, por lo que puedes conseguir alguna sonrisa pícara o curiosa. Cuando tienen seis meses ya se sientan solitos y se pueden hacer fotos muy expresivas. Al llegar al año empiezan a gatear y no hay quien les pare. Es el momento en que el estudio puede dar sus mejores frutos.
Nuestra sesión de bebé cuesta solo 190€ ya sea en casa o en exteriores.
Cuando hace buen tiempo y empiezan a ser mayorcitos podemos sacarlos a un parque para hacer fotos en la naturaleza.